Editorial escrito ayer para "El Penalti" en Radio Marca Barcelona
Ayer se celebró el sorteo de octavos de final de la Champions, y nuevamente al Real Madrid le tocó un rival mucho más asequible que al FCBarcelona, pero eso ya ha dejado de ser noticia, y no debe llevarnos a pensar en bolas frías y calientes.
Ciertamente, la
suerte tan reiterada hace dudar del propio sorteo, y sería interesante que de
cara a evitar suspicacias, las bolas se extrajeran de unos bombos, y con esa
petición el club azulgrana debería
unirse a otros clubes exigiendo limpieza y claridad.
Por la tarde a
Cristiano le entregaron(utilizar el verbo ganar sería incorrecto) su cuarto
balon de Oro.
Los 173
periodistas con derecho a voto(el nuestro es Relaño) se decantaron por el
portugués ganador con su club de una
Champions, en la final de la cual marcó un penalti de la tanda, y la Eurocopa
con su país, en la que jugó poco y marcó menos, pero el marketing blanco volvió
a ganarle la partida al propio futbol.
Y se entiende. En
muchos de esos países(algunos difíciles de situar en un mapa mundi) tan solo
reciben las noticias que se generan desde España, y hay que reconocer que en
eso, el Real Madrid y Florentino nos llevan muchos cuerpos de ventaja.
Mañana mismo el
propio presidente blanco dará por inaugurada la campaña para el balón de Oro
2017, mientras aqui, en el Barça, seguiremos confiando en que los votantes
decidan con honradez y elijan al mejor tan solo por los méritos en el terreno
de juego.
Y así nos va.
Messi de blanco llevaría 9 consecutivos, y solo tiene 5.
Los resultados de
las votaciones y del orden final(no olvidemos que Iniesta no ha obtenido ni un
solo punto) lo ha resumido Lewandosky en twitter con solo 3 emoticonos.